El sacerdote de la Parroquia San Francisco de Asís del distrito de Bernal, junto a otros voluntarios recaudó 15 mil soles, logrando dotar de medicamentos a la población del bajo Piura para combatir síntomas de covid-19.
En medio de este crítico panorama algunas personas decidieron enfrentar al miedo para convertirse en ‘héroes sin capa’ para auxiliar a quienes menos tienen. Uno de ellos, es el Padre Javier Dedios Chunga, sacerdote de la Parroquia San Francisco de Asís en el distrito de Bernal, quien lleva apenas 10 meses en el pueblo pero se ha ganado el cariño de la población con sus gestos y acciones.
Tras los decesos en los pueblos del bajo Piura, el religioso convocó al Padre Enrique Bautista (vicario de la parroquia) y a dos jóvenes voluntarios (una catequista contadora de profesión y a un periodista del pueblo) para realizar una colecta solidaria y salvar vidas.
El 24 de mayo en Misa Dominical el Padre Javier lanzó la colecta y en pocas horas sumó más de 2 500 soles. A la fecha, lo recaudado supera los 15 mil soles. Pero no solo se dedicó a pedir donaciones económicas, sino que gestionó apoyo para Bernal, logrando dotarse de un balón de oxígeno, manómetros, medicina y leche a los pacientes , gracias al apoyo de instituciones, voluntarios y ONGs.
Medicamentos
En Bernal, los pacientes que lograban atención recibían sus recetas pero no encontraban los medicamentos en el pueblo, donde apenas hay dos o tres boticas. Por ello, la Parroquia decidió continuar con la colecta y comprar medicina AntiCovid para auxiliar a los pacientes que presentaban síntomas y corrían el riesgo de agravar.
Luego de una incansable búsqueda se compraron las primeras Ivermectina, Azitromicina, Prednisona, Cardioaspirina, Paracetamol y Supracalm que sumaron su primer lote de medicina, luego desde Trujillo sumaron el segundo lote. El tercero lo adquirieron con una cadena de farmacias a quienes les contaron la misión de auxilio humanitario. La gestión funcionó y Bernal pudo abastecerse de medicamentos para el primer y segundo nivel, antes de que los pacientes agraven.
Los medicamentos fueron entregados al Centro de Salud y un lote de reserva permanece en la casa parroquial. Pero además fueron más allá, un porcentaje de su medicina fue donado por Bernal a sus pueblos vecinos, a los centros de Salud de La Unión; de Rinconada Llicuar; de Cristo Nos Valga; Bellavista y San Clemente. Incluso, a tres comisarías del sector se les ha dotado con medicina para emergencias. Una muestra de que el auxilio entre pueblos hermanos, también pudo ser posible.
