El comandante Óscar Ramos Viera, jefe de la comisaría de Chincha, resultó herido en la cabeza mientras lideraba un operativo de desalojo en el asentamiento humano Nueva Jerusalén Unida, en Chincha Alta. La intervención se llevó a cabo para dar cumplimiento a una orden judicial, sin embargo, la situación se tornó violenta cuando los ocupantes ilegales del lugar comenzaron a agredir a los efectivos policiales.
Durante el desalojo, en el que participaron efectivos de distintas unidades de la División Policial de Chincha, aproximadamente 40 familias ocupantes ofrecieron resistencia, negándose a abandonar el terreno. En medio de los enfrentamientos, un grupo de personas comenzó a arrojar piedras y palos a los agentes del orden, impactando uno de estos objetos en la cabeza del comandante Ramos Viera, quien sufrió una grave herida que requirió atención médica inmediata.
En el lugar de los hechos, la policía detuvo a tres hombres, presuntos responsables de los ataques contra los uniformados, así como a una mujer con orden de captura vigente por el delito de hurto agravado. Todos los detenidos fueron puestos a disposición de la Sección de Investigación Criminal para iniciar las diligencias correspondientes y evaluar posibles cargos por delitos de desobediencia y agresión a la autoridad.
Ante la gravedad de sus heridas, el comandante Ramos Viera fue evacuado de emergencia a un establecimiento de salud, donde se le realizaron siete puntos de sutura. Las agresiones y los enfrentamientos se extendieron por varios minutos antes de que las fuerzas del orden lograran controlar la situación y completar la evacuación de los ocupantes.