La desnutrición infantil ascendió a 19%, lo que representa un riesgo para la salud y el desarrollo infantil en regiones como Huánuco.
La pandemia ha puesto de relieve la importancia de garantizar un acceso adecuado a servicios de salud de calidad para la población. A tres años del inicio de la pandemia, es crucial analizar cómo han evolucionado los principales indicadores de salud infantil en la región de Huánuco, Perú.
La nutrición infantil en regiones como Huánuco sigue siendo un desafío significativo. Aunque la tasa de desnutrición infantil disminuyó ligeramente del 19.4% en 2019 al 19.0% en 2022, la región aún se encuentra entre las seis con la mayor tasa de desnutrición crónica en menores de 5 años. Esto impacta directamente en la calidad y la expectativa de vida de la población, manteniéndose la esperanza de vida alrededor de 75 años en este período, por debajo del promedio nacional de 77 años. La cobertura médica ha mejorado, pero todavía está por debajo del promedio nacional, con 12.1 médicos por cada 10,000 habitantes.
La anemia infantil es otra preocupación en Huánuco, afectando al 51.8% de los niños de 6 a 35 meses en 2022, un aumento significativo desde el 39.1% en 2019. Esta problemática está vinculada al estado de salud de la madre durante el embarazo. La anemia en mujeres en edad fértil también ha aumentado, llegando al 18.2% en 2022 desde el 17.1% en 2019. Además, la cobertura de vacunación básica en niños menores de 36 meses ha disminuido del 71.3% en 2019 al 63.0% en 2022.
Ante estos desafíos, es imperativo que las autoridades locales y regionales de Huánuco presten especial atención al desarrollo infantil. Mejorar tanto la cobertura como la calidad de los servicios de salud es fundamental para elevar la calidad de vida de la población y garantizar un adecuado desarrollo físico y cognitivo de las futuras generaciones. La atención a la nutrición, la anemia y la vacunación infantil debe ser una prioridad en la agenda de salud pública de la región.
